La semana pasada fue el cumpleaños de mi cuñado Javi y como no podía ser de otra forma le preparé una tartita, ahora me he aficionado a las tartas frías y es que me resultan buenísimas y muy cremosas.
Esta al estar recubierta con el glaseado de caramelo parece que mezclas chocolate con carámelos de toffe de toda la vida, es espectacular el sabor.
INGREDIENTES
Para la base:
120 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
300 gr de galletas oreo (con el relleno).
Para el relleno:
150 gr de chocolate blanco.
150 gr de chocolate fondant.
320 gr de queso crema.
140 gr de azúcar.
370 gr de nata para montar muy fría.
170 gr de yogur de vainilla.
1 sobre y medio de gelatina neutra en polvo.
3 cucharadas de agua fría.
Para el glaseado de caramelo:
175 gr de azúcar.
175 gr de agua
150 gr de nata para montar.
12 gr de maizena
4 hojas de gelatina
PREPARACION
En primer lugar prepara la base de galletas. Tritura las galletas con ayuda
de un robot de cocina o metiéndolas en una bolsa y golpeándolas con un rodillo
hasta convertirlas completamente en polvo. Mezcla ahora estas galletas con la
mantequilla derretida hasta formar una masa arenosa.
Distribuye esta pasta de galleta sobre la base y los laterales del molde,
presionando bien. Lleva el molde al frigorífico mientras continuamos con el resto
de la tarta.
Vamos ahora con la crema de relleno. Tritura el chocolate blanco y el
fondant por separado y reserva. Si no tienes con qué triturarlo, puedes
cortarlo en trozos lo más pequeños posible, después continuaremos con los
chocolates.
Vierte en un bol grande el queso cremoso junto al azúcar y mezcla con una
batidora de varillas a velocidad media hasta que esté bien integrado. Añade el
yogur y la nata y continúa batiendo para integrar estos ingredientes.
Pon la gelatina en un cuenco con el agua e introduce en el microondas unos
segundos para disolverla. Mezcla con una cuchara para que no queden grumos y
añádela a la crema que acabamos de batir. Mezcla de nuevo con la batidora para
que la gelatina se distribuya bien.
Vierte esta crema en dos boles diferentes. Reserva.
Funde cada chocolate en el microondas o al baño maría y cuando estén bien
disueltos y líquidos, vierte cada chocolate en un bol, mezclando bien
con la crema.
Saca el molde del frigorífico y con ayuda de un cucharón ve echando una
porción de cada una de las cremas, alternándolas y hasta acabarlas. Mezcla
un poco con una cucharadita para dar efecto marmolado. Lleva de nuevo al
frigorífico y deja reposar unas 5-6 horas.
Pasado el
tiempo de reposo, prepara la cobertura. Poner la gelatina en agua fría
para que se ablande. En una tacita disolver la maizena con 3 - 4
cucharadas de agua.
Preparar un
caramelo seco con el azúcar. Para hacer el caramelo seco colocar un cazo en el
fuego, cuando esté caliente echar el azúcar poco a poco, en dos veces, primero
la mitad y a medida que se va caramelizando, añadir el resto, removiendo con
una cuchara de madera hasta que se derrita y tome un color de caramelo
oscuro.
Bajar el fuego
al mínimo y añadir despacio toda el agua, removiendo rápidamente y con mucho
cuidado de no quemarnos con el caramelo.
Añadir la nata
líquida y mezclar con unas varillas de mano. Añadir la maizena disuelta, subir
un poco el fuego y cuando rompa a hervir de nuevo, dejar cocer unos 30
segundos removiendo sin parar con las varillas.
Por último
agregar la gelatina bien escurrida, y remover hasta que se integre por
completo.
Retirar del
fuego y pasar el glaseado de caramelo por un tamiz o colador para eliminar
impurezas. Dejar entibiar.
Con un
termómetro de cocina tomar la temperatura del glaseado, cuando esté a
25°C - 28°C ya está listo para utilizar.
Hasta aquí la entrada de hoy,
Gracias por pasar por aquí.
Besitos mil ♥
Madrecita como tiene que estar esto... Chocolate y caramelo, mis ods debilidades en una misma tarta
ResponderEliminarBesos
hola bonita, ainss venga que pasen prontito esos problemas laborales y te relajes un poco. La tarta riquísima diossssss ese glaseado. un besote muy fuerte.
ResponderEliminar